La respuesta corta es que el queso solo no es tóxico para los perros, pero depende de tu sensibilidades individuales del perro si debe dárselo de comer. Los perros pueden comer queso, pero hay algunas cosas a tener en cuenta antes de comenzar a alimentar a su cachorro con grandes trozos de queso cheddar.
Preocupaciones sobre el queso para perros
-
El queso puede tener un alto contenido de grasa.
Si su perro tiene sobrepeso o necesita reducir algunas libras, definitivamente debe dejar de comer queso. Otra preocupación es si su perro tiene antecedentes de pancreatitis, ya que los alimentos ricos en grasas están asociados con esta afección.
-
El queso puede tener un alto contenido de sal.
Ciertos quesos (especialmente los quesos curados duros) contienen un contenido muy alto de sal, que puede ser peligroso y provocar intoxicación por sodio si los perros comer demasiado. La mayoría de los perros podrán beber suficiente agua fresca para diluir la sal que consumen, pero es bueno tener cuidado. Los síntomas comunes de la intoxicación por sodio son sed extrema, falta de energía, vómitos, diarrea acuosa y pérdida del apetito. Si su perro tiene estos síntomas, llévelos al veterinario de inmediato. Otro riesgo asociado con los alimentos con alto contenido de sal son los perros con problemas renales.
-
El queso podría tener ingredientes añadidos que son tóxicos para los perros.
Algunas adiciones comunes al queso son el ajo, la cebolla o el cebollino, que son todos tóxicos para los caninos. ¡Siempre revise los ingredientes primero!
-
Su perro puede ser intolerante a la lactosa.
Si no está seguro de si su perro puede digerir bien el queso, primero intente alimentarlo con un trozo muy pequeño de queso. Vigile de cerca a su perro durante las próximas 24 horas para detectar cualquier signo de malestar estomacal o cambios negativos en el baño. Si sabe que su perro es intolerante a la lactosa, debe omitir el queso por completo o probar una opción muy baja en lactosa, como el queso de cabra.
¿Qué tipos de queso pueden comer los perros?
Queso blando (Cheddar joven, Mozzarella, Queso en tiras)
Todos los quesos básicos que se encuentran comúnmente en la casa son seguros para que un perro los coma con moderación. La mozzarella o la mayoría de los quesos blandos tienen un alto contenido de grasa, por lo que si desea compartir una rebanada con su perro de vez en cuando, intente obtener queso bajo en grasa.
Requesón bajo en sodio
Siempre que su perro coma un requesón bajo en sal, puede ser una excelente adición ocasional a la dieta de su perro. El requesón tiene un buen nivel de proteínas, calcio y vitaminas (siempre que sea de alta calidad). Los probióticos también se encuentran en el requesón, que pueden ser útiles para calmar el malestar estomacal de un perro. El requesón también viene en una variedad baja en grasa para perros preocupados por el peso.
Queso crema sin sabor, bajo en grasa
Puede alimentar a su perro con queso crema sin sabor, pero solo en cantidades pequeñas y poco frecuentes. El queso crema es rico, graso y rico en calorías, por lo que debe ser alimentado con cuidado e idealmente debe ser de la variedad baja en grasa. Limítese a queso crema simple en lugar de saborizado (sí, estamos hablando de esa hierba y queso crema de ajo) ya que pueden tener ingredientes agregados como ajo o cebolla, que son tóxicos para los perros.
¿Qué tipos de queso son malos para los perros?
Aparte de las advertencias anteriores sobre el queso en general (sal, grasa e ingredientes añadidos), el queso principal que se debe evitar por completo es el queso azul.
Queso azul y quesos maduros mohosos (Roquefort, Stilton, etc.)
Cuando el queso azul está madurando, el moho dentro del queso produce una micotoxina llamada Roquefortina C. Esta sustancia puede ser muy tóxica en perros y debe evitarse por completo. Si bien evitar el queso azul es la mejor solución, si su perro ingiere accidentalmente una cantidad muy pequeña de queso azul, probablemente estará bien.
Si se consume, vigile de cerca a su perro durante las próximas horas y llame al veterinario de inmediato si nota vómitos, convulsiones o diarrea.
Consejos finales para alimentar a su perro con queso:
- La moderación es la clave. Dale queso a tu perro en pequeñas cantidades y no con frecuencia.
- Empiece poco a poco si su perro nunca ha ingerido lactosa para asegurarse de que no sea sensible a ella.
- Trate a su perro con quesos bajos en sal y grasas.
- Evite el queso azul o quesos «mohosos» similares.
- Pregúntele a su veterinario de antemano si el queso es seguro para su perro.
Incluso puedes compartir tu comida reconfortante favorita con tu perro, como macarrones con queso, pero siempre practica la moderación. Este tipo de golosinas deben constituir un porcentaje muy pequeño de la dieta de su perro. ¡Aprenda sobre 10 alimentos más para personas que puede alimentar a su perro!