Especialidades y afecciones Salter-Harris I Fractura del peroné distal Salter-Harris I Fractura del peroné distal

El peroné distal es el hueso prominente en el exterior del tobillo. En un niño en crecimiento, hay una placa de crecimiento en el peroné distal. Las placas de crecimiento están formadas por cartílago, que es más blando y más vulnerable a las lesiones que el hueso maduro. Una fractura de Salter-Harris I atraviesa el plano de la placa de crecimiento, sin dañar el hueso maduro circundante. Es el tipo de fractura más leve que puede ocurrir en una placa de crecimiento.

¿Cómo ocurre una fractura Salter-Harris I?

Una fractura Salter-Harris I del peroné distal típicamente ocurre cuando un niño «rueda» o «tuerce» el tobillo. Es más probable que esta lesión ocurra en baloncesto, fútbol, fútbol y voleibol. Una fractura de Salter-Harris I del peroné distal puede confundirse fácilmente con un esguince de tobillo. En un adulto, torcerse el tobillo con mayor frecuencia resulta en un esguince de los ligamentos del tobillo. Sin embargo, en un niño en crecimiento, la placa de crecimiento es mucho más débil que los ligamentos circundantes, lo que significa que es más probable que la misma lesión por torsión cause una fractura de la placa de crecimiento que un esguince de tobillo.

¿Cuáles son los síntomas de una ¿Fractura de Salter-Harris I?

Habrá dolor en la parte exterior del tobillo. A veces hay hinchazón y hematomas. Su hijo puede tener dificultad para caminar inmediatamente después de la lesión y puede caminar cojeando. A menudo, no puede seguir corriendo o practicando deportes.

¿Cómo se diagnostica una fractura Salter-Harris I?

Su médico examinará el tobillo de su hijo. Habrá sensibilidad sobre la placa de crecimiento y no habrá sensibilidad sobre los ligamentos del tobillo. Las radiografías pueden mostrar algo de hinchazón o ensanchamiento de la placa de crecimiento, pero más comúnmente las radiografías son normales. Debido a que una fractura de Salter-Harris I es una lesión leve de la placa de crecimiento, las radiografías no siempre muestran evidencia de la fractura. La historia clínica y el examen clínico de su hijo por parte del médico de su hijo son las claves para hacer un diagnóstico preciso de una fractura Salter-Harris I.

¿Cómo se trata una fractura Salter-Harris I?

Su médico puede recetarle un yeso para caminar de pierna corta o un estribo de aire. La aplicación de hielo durante 10 a 15 minutos varias veces al día puede disminuir el dolor y promover la curación. Si el dolor es intenso, es posible que se necesiten muletas durante los primeros días hasta que sea más cómodo soportar peso. Es necesario descansar de las actividades de alto impacto (correr y saltar) para que se cure esta fractura. La curación generalmente demora entre 4 y 6 semanas, momento en el cual su hijo podrá volver a los deportes y actividades sin peligro. Es muy raro que una fractura de Salter-Harris I cause problemas con el crecimiento del peroné distal (menos del 1% de las fracturas).

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